Chile, país de contrastes...

Una amiga siempre decía que Chile era un país de contrastes.
Largo y angosto...
con desiertos y glaciares...
con gente linda y gente muuuuy fea....
con gente rica y gente pobre...
etc, etc, etc....
aqui dos fotos elocuentes...



Es Ud. ingeniero o ingenioso????

Ayer saliendo del metro vi un afiche concurso sobre el Ingenio.
Y yo entusiasmada leí en las bases: "organiza escuela de ingenieros de la univer......"
QUEEEEEEEE? , exclamé yo....
Pero que tiene de "ingenioso" un ingen...???
Fue entonces que descubrí la supuesta relación que existe entre un "ingeniero" y el Ingenio.
Un ingeniero debería ser un vivo y chispeante ingenioso y no un "cabeza cuadrada"que sólo sabe fórmulas para resolver problemas y ganar plata... Si no, el libro se llamaría "LAS AVENTURAS DEL INGENIERO HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA"...

Y le conté mi gran descubrimiento a mi padre ingeniero y le hice un elocuente test para rebatirle sus argumentos:
Mira papá. Un campesino tiene un peral y le vende siempre a un mismo comprador su fruta, pero esta vez el comprador quería saber cuantas unidades le iba a vender. Si el árbol tenía 3 brazos, cada uno con 12 ramas y en cada rama habían dos frutas ¿cuantas ciruelas le vendería esta vez???

Mi padre al escuchar los números sacó de inmediato uno de los lápices que guarda en el bolsillo derecho de su camisa y comenzó la multiplicación ingenieril de inmediato...Pero antes que él comenzara sus cálculos, mi madre reparó en que no le podía vender ciruelas si él tenía un peral.

Cierto!!! he ahi una astuta ingeniosa que descubre la trampa!, le dije....
Y mi padre derrotado, se largó a reir...
Y fue su risa esta vez la que me iluminó. El ingenio de un ingeniero pasa precisamente por venderle peras por ciruelas a quién tenga la plata que se convertirá en su futuro sueldo...

jeans o no jeans??? he ahi el dilema...


Nadie se lo cuestiona, sólo lo usan argumentando su fácil combinación y su comodidad.
Su status de "casual" que a la vez te permite ir a reuniones.
Su modelo "vaquero" adaptable a cualquier cuerpo.
su resistencia.
su temperatura perfecta...

Medio Chile usa jeans. Quizás más de medio Chile!!!!!!!!!!
Lo cierto es que me siento absolutamente fuera de lo normal porque no uso jeans ni tampoco vi la Guerra de las Galaxias.. (No, ninguna de las no sé cuantitas películas...)
No ocupo el uniforme ni vi la película que les metió "eso" en la cabeza jajajaa....
Pero no es por resistir y ser revolucionaria, es sólo una cuestión estética.... Soy más banal....
La razón es un simple No me gusta.
Respeto a quienes lo usan, me da lo mismo. Pero a mí me parecen gruesos, pesados, calurosos, poco flexibles, poco creativos, uniformados y absolutamente predecibles.
Y eso es lo que más me molesta de los jeans.
Que sé que más de medio Chile tiene y usa jeans.
Que es muy probable que si te juntas con alguien, ese alguien esté usando un jeans.
Que es muy fome ver a la gente caminando y que un 70% sea igual de la cintura para abajo.

A mi eso me coarta una de mis actividades favoritas: jugar a que le achunto a cómo anda vestida la gente. Sólo por jugar a descubrirlo, a predecirlo.
Y es terrible de fome achuntarle a un jeans...
Es como achuntarle a nada...
En cambio es terrible de bakán cuando le achuntas.., Cuando imaginas que eligió a conciencia lo que se puso, esa polera roja, que le queda igual que la amarilla, pero que le da un aire a Giligan y que sólo se pone cuando está muy, muy feliz....

La Maria Margdalena Chilena


Vestidas de rojo, llenas de velas y amuletos para la suerte, las dos amigas se enchularon y se compraron un menú chino para hacer un picnic en medio de la Alameda el 31 de diciembre...
Este año tiene que ser el nuestro.
Y sentadas frente a la iglesia de San Francisco conversábamos sobre nuestras pintas: muy putonas o muy comunistas...

Terminado el coctel y la petición de deseos, enfilamos rumbo a la Moneda para encontrar nuestras mejores ubicaciones y poder disfrutar de los fuegos artificiales como Dios manda. Y entre tantas cabezas de colores, tanta gente en silla de playa y gente preparando la champaña, avistamos un trío de alemanes bien rubios que demarcaban nuestra ubicación preferencial...

"Van a creer que somos putas", pensamos. Pero nos dió lo mismo, porque las peruanas chacaloneras ya estaban haciendo de las suyas con esos rubios caucásicos y había que defender la patria.
Pero era muy dificil...
Entre que los alemanes no hablan, ni se mueven y se jactan de su "naturaleza" poco expresiva, Perú había ganado terreno con el único medianamente humano.
El idolatrado europeo estaba contento con este ejemplar autóctono que se abalanzaba a sus brazos y con suerte regalaba una que otra mirada de vez en cuando.
Perdimos la guerra, ganó Perú, tenemos pinta de putas...
Mejor es que nos vayamos....
Come on!!!, que aqui, cuando se trata de jotear, hasta la más india sabe hablar inglés.
Y en esto, aparece Magdalena.
La reina, María Magdalena....
-Para donde van chiquillas? estos alemanes tienen que conocer Chile!!!

Y los agarró en trencito, se los quitó a las peruanas, se agarró al más pavo de todos y mi amiga conservó al ejemplar humano...

No lo puedo creer, le dije... pero cómo???
Supervivencia, me dijo. Es cosa de supervivencia.


Era cierto.
Perú tuvo siempre ventaja. Eran un imperio. Pero llegaron los europeos y los aniquilaron a todos... mientras que los chilenos seguimos resistiendo...
Y así, mientras mi amiga se agarraba al alemán, toda la tribu chilena, esa terriblemente chilena que se instala en año nuevo bajo la torre Entel, gritaba con fuerza: CHILE, CHILE!!!
Las peruanas se alejaron.
Nosotras pronto nos fuimos.
El alemán tras de nosotras.... las de rojo, con pinta de putas, entrenadas por la mismísima Magdalena, a sobrevivir.

Caminante, hay camino o se hace el camino al andar????

Valparaiso es un lugar de los imperdibles y también un paraiso para perderse.
Y yo por supuesto, me perdí... pero en auto.

La pava quería huir rápido de valpo en año nuevo sin tener problemas de pasajes o compañeros de bus y se fue a ver a sus amigos porteños en auto, sabiendo que esta ciudad está hecha para andar a pié, que sus cerros tienen calles que no salen a ninguna parte y que las calles, entre rotas, angostas y mal olientes, están además en estas fechas plagadas de santiaguinos hippies...

Nada, me fui en auto no más, arriesgando el motor en la subida ferrari y todo los demás al tratar de estacionarme cuesta abajo... pero como no habia ningún estacionamiento, terminé subiendola entera y totalmente perdida entre los cerros porteños, preguntandole a cualquiera con pinta de avispao donde estaba Ferrari...

Puros santiaguinos ignorantes.

Hasta que un caballero gentil me orientó: baje por ahi y a la derecha y luego baje de nuevo y otra vez a la derecha y allí va pa allá y llega ligerito, derecho no más derecho...

¿¿¿¿Cómo entender??? si entre para allás y para acás no daba ninguna indicación concreta...

Hasta que salió de adentro de un negocio un viejo zorro de puerto y me dió la receta mágica:
Siga el camino no más, el camino la lleva...
Dicho y hecho.
Segui el camino y salí justo al frente de la casa de mi amigo.

Cómo es posible que el camino te lleve? ¿no se supone que el caminante se hace el camino al andar???? le reclamé entre risas a mi amigo cuando llegué...

-Pa qué po? me dijo. El camino está hecho, sólo tienes que encontrarlo...

Y claro, el camino efectivamente estaba hecho, sólo que la pava está acostumbrada a perderse en este tablero de ajedrez que se llama Santiago, a seguir sola un rumbo cuadrado, que no te desorienta nunca porque es cuadrado pero tampoco te lleva muy lejos... En cambio en estos cerros, desordenados y sin salidas, hechos como el mapa del juego de la oca, solo hay que seguir el camino...

Y lo lindo, es que finalmente llegué a la meta...