El futuro de mí misma...


Y allí va la viejecilla:
pequeña, canosa, curcuncha... vestida de rojo con lunares. Paseando por el céntrico Santiago un día con más nubes que sol.
Tal como si un papel arrugado dibujara lo que proyecto en mi cabeza como "identidad" propia...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Solo... yo te imagino harto más erguida y con la cabeza colorá también jajajaja
oye paseando pr los blogs y ya con animo de actualizar el mio (soy una vergüenza, y eo que ahora soy una computina tecnocietifica a mil) no sé como haces para ocultar las entradas antiguas, como donde pones "entradas anterores" y con un "simple clik" accedes a las otras entradas...a ver si me enseñas...
valerón... soportando KOSOVO en una casa de plástico