Alicia

Yo crecí con esa versión, hasta que investigando en el folcklore descubrí que a la linda Alicia le faltaban dos estrofas:

//Alicia cayó enferma, carolín//Quizá se sanará, carolín cacao leo lao.//Alicia ya está muerta, carolín.//La llevan a enterrar, carolín cacao leo lao////Alicia va en el coche, carolín //Con techo de cristal, carolín cacao leo lao//Con varios oficiales, carolín//y un cura sacristán, carolín cacao leo lao//Encima de la tumba, carolín//un pajarillo va, carolín cacao leo lao Cantando pío, pío, carolin cacao leo lao....

Suena un poco macabro si uno no entiende que se trataría de un canto de angelitos. En el campo, cuando se muere un niño, se hace una fiesta porque el "angelito" se va al cielo. Se recita y se canta a lo divino. El padre es DIOS y todos la acompañan en este tránsito festejándola y arreglándola para que no tenga temor.

Me gusta entender la tradición como una manera distinta de relacionarse con Dios. En la mitología popular abundan cuentos del diablo, de brujos o lloronas, espíritus malignos que nos asustan si nos portamos mal. Pero en las fiestas tradicionales existe Dios y existe también en los momentos dolorosos. "Alicia va en el coche" es una canción alegre y es sorprendente darse cuenta de cómo la tradición se nos presenta sin que nos demos cuenta, mediada por la oralidad a través de cantos populares que aprendemos desde niños.

Entender la muerte y con ello la fragilidad de nuestra vida (la "dramaticidad de nuestra existencia" como decía una sabia maestra de mi escuela) es un proceso importante y muy rudo para un niño, incluso traumático. Que bonito es que inconcientemente, a través de este canto tradicional, la muerte se les presente festiva y sólo como un tránsito que permite el encuentro con nuestro verdadero Padre.

No hay comentarios.: